Un por momentos balbuceante mandatario apuntó contra la condena de su contrincante, mientras que el republicano lo cruzó por la inflación y la inmigración.
Donald Trump y Joe Biden tuvieron su primer debate.
El presidente demócrata, Joe Biden, y su rival republicano, Donald Trump, intercambiaron ataques sobre el aborto, la inmigración y su gestión de la economía al inicio de su debate del jueves, ofreciendo a los votantes un raro cara a cara entre los dos candidatos de más edad que han aspirado nunca a la presidencia de Estados Unidos.
Biden, que llamó la atención varias veces por balbucear con sus palabras en ocasiones durante la primera media hora del debate, mientras Trump repetía un ataque tras otro que incluía varias falsedades muy trilladas, entre ellas afirmaciones de que los inmigrantes han llevado a cabo una ola de crímenes y que los demócratas apoyan el infanticidio, de acuerdo con la agencia Reuters.
Al respecto, dos funcionarios de la Casa Blanca dijeron que Biden estaba resfriado. Sin embargo, a medida que se desarrollaba el debate, pareció tomar su ritmo, lanzando líneas de ataque con más enfoque. A mitad del camino, se refirió por primera vez a la condena de Trump por encubrir pagos de dinero a la estrella porno Stormy Daniels, llamándolo «delincuente».
En respuesta, Trump mencionó la reciente condena del hijo de Biden, Hunter, por mentir sobre su consumo de drogas para comprar un arma.
Cuando se le preguntó sobre el ataque del 6 de enero de 2021 al Capitolio de Estados Unidos por parte de una turba de sus partidarios, el expresidente se negó a aceptar cualquier responsabilidad y afirmó que muchos de los arrestados eran inocentes.
«Este tipo no tiene ningún sentido de la democracia estadounidense», se burló Biden en respuesta.
A la mitad del debate de 90 minutos, Biden dijo: «Hay una razón por la cual 40 de los 44 altos funcionarios de su gabinete se negaron a respaldarlo esta vez. Su vicepresidente no lo ha respaldado esta vez. ¿Por qué? Lo conocen bien, ejercieron con él. ¿Por qué no lo respaldan?».
Biden también culpó a Trump de permitir la eliminación del derecho al aborto a nivel nacional al nombrar a conservadores para la Corte Suprema de Estados Unidos, una cuestión que ha atormentado a los republicanos desde 2022.
En respuesta, Trump argumentó que Biden no apoyaría ningún límite a los abortos y dijo que devolver el tema a los estados era el curso de acción correcto.
Trump dijo que Biden no había logrado asegurar la frontera sur de Estados Unidos, lo que dio paso a muchos criminales. «Yo lo llamo crimen de inmigrantes de Biden», dijo el republicano. En respuesta, Biden dijo: «Una vez más, está exagerando, está mintiendo».
El choque televisado por CNN tuvo lugar mucho antes que cualquier otro debate presidencial moderno, más de cuatro meses antes de la jornada electoral del 5 de noviembre.
Los dos candidatos aparecieron sin público en directo, y sus micrófonos se cortaban automáticamente cuando no era su turno para hablar, ambas reglas atípicas impuestas para evitar el caos que descarriló su primer debate en 2020, cuando Trump interrumpió repetidamente a Biden.
Al comenzar el debate, los dos hombres -que no han ocultado su antipatía mutua- no se dieron la mano ni se saludaron.
Las primeras preguntas se centraron en la economía, ya que las encuestas muestran que los estadounidenses están insatisfechos con el desempeño de Biden a pesar del crecimiento salarial y el bajo desempleo.
Biden reconoció que la inflación había provocado un aumento sustancial de los precios con respecto al inicio de su mandato, pero dijo que merecía el reconocimiento por haber «recompuesto las cosas» tras la pandemia de coronavirus.
Trump afirmó que había supervisado «la mejor economía de la historia de nuestro país» antes de la pandemia y dijo que tomó medidas para evitar que la caída libre económica se profundizara aún más.